Publicado en Página/12. "Sociedad: Opinión".
Lunes, 27 de Agosto de 2012.
Por Horacio Garaguso, Aritz Recalde y Matías Muraca.
Vicedecano y docente de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Mar del Plata;
director de Posgrado de la Universidad Nacional de Lanús;
investigador docente de la Universidad Nacional de General Sarmiento.
Hace unas semanas el Instituto Nacional de Estadística y Censos publicó más resultados definitivos del Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2010. Mientras desde varios sectores el organismo estadístico es descalificado, como si lo único que produjera fueran sus índices de precios, ciertamente, advertimos que hasta ahora no fue suficientemente valorado el censo como complejo operativo de Estado y fuente privilegiada de información acerca de la Argentina actual.
El censo es un instrumento que permite realizar un análisis y evaluación demográfica que constituye un punto de referencia para el uso estadístico continuo. Como base de datos pública, permite proyectar, establecer y desarrollar políticas públicas tanto como estudios especiales. Justamente ahí radica su importancia y centralidad estratégica.
Si el Censo del Bicentenario hubiese fracasado, sería tapa de todos los diarios hegemónicos; sin embargo, como fue un operativo exitoso, el censo no es “noticia”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario